lunes, 9 de noviembre de 2015

Análisis del preámbulo de la LOE y de la LOMCE

(Propuesta de trabajo 2.1)

Comparación


En la actualidad tenemos funcionando conjuntamente dos leyes de la educación: La Ley Orgánica de Educación de 2006 (LOE) y la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa de 2013 (LOMCE).

En la primera parte de ambas leyes, en el preámbulo, ya se puede vislumbrar que estas leyes tienen marcadas diferencias y no solamente educativas. Dichos preámbulos son muy distintos ya que el de la LOE es más explícito y el de la LOMCE es más elusivo. En la LOE se pueden ver palabras clave como “bienestar individual”, “colectivo”, “construir personalidad”, “desarrollar capacidades”, “conformar identidad personal”, “transmitir”, “renovar cultura, conocimientos y valores”, “convivencia democrática”, “respeto a las diferencias”, “solidaridad”, “evitar la discriminación”, “cohesión social”, “sociedades avanzadas, dinámicas y justas” y finalizando con que “una buena educación es la mayor riqueza y el principal recurso de un país y de sus ciudadanos”.

Por el contrario en el primer párrafo del anteproyecto de la LOMCE se pueden leer palabras clave como “competitividad de la economía”, “competir con éxito en la arena internacional”, “desafíos”, “apuesta por el crecimiento económico” y “conseguir ventajas competitivas en el mercado global”.

Como se puede ver solo leyendo estas palabras clave la ley de educación más antigua se centra más en los individuales que en los colectivos, en el crecimiento personal más que en el crecimiento económico, en compartir en lugar de competir.

Ambas leyes coinciden en que hay que mejorar la calidad de la educación (a pesar de que solo la más moderna lo tenga enunciado en el título) y buscar la globalización e integración con el resto de países. A pesar de tener unas medidas diferentes, ambas leyes persiguen la autonomía de los centros, rendir cuentas y ser evaluados externamente.

Sin embargo son más las diferencias que las similitudes en estas leyes que curiosamente coexisten hoy. Ya que la LOE atiende a la diversidad como agente de mejora de la calidad y equidad, mientras que la LOMCE expresa que los talentos difieren de unos alumnos a otros y que hay que potenciar dichos talentos.

La LOE en este aspecto subraya palabras clave como “inclusión”, “cohesión social”, “ejercicio de la ciudadanía democrática” y “equidad” mientras que por otro lado la LOMCE acentúa la “empleabilidad”, la “integración”, la “competitividad” y la “movilidad social”.

También, y muy importante, son opuestos los tipos de sistema educativos que se proponen en ambas leyes educativas ya que ley educativa más moderna apuesta por una estructura que va ramificando a los alumnos mediante un sistema de pruebas externas en función de su potencial, esta estructura en abanico se va diversificando progresivamente en más y más opciones para canalizar el alumnado y que difícilmente pueden revertirse. Por el contrario la estructura de la LOE propone una estructura más flexible con conexiones entre las distintas formaciones y los distintos tipos de enseñanza. Gracias al modelo de caminos de ida y vuelta entre la formación y la vida laboral permite que se dé un aprendizaje a lo largo de la vida.


Conclusión


Como tantas veces se ha comentado la ley más moderna de la educación está muy cargada de política por lo que es susceptible de cambiar junto a los cambios políticos. Esto es lo que sucede cuando se politiza la educación, valor que nunca debería politizarse sino mantenerse y respetarse. La política en democracia, por definición, va cambiando con el paso de los años pero en cambio la Ley Educativa no debería cambiar sino ser estable por lo que desde aquí propongo, como se han propuesto tantas veces, que se separen estos ámbitos de la sociedad que nunca deberían ir unidos en ninguna sociedad. No sabemos que deparará el futuro pero si se vuelve a cambiar esta Ley abogaría por una ley hecha a conciencia más neutral que no “ofenda” a los ideales de ningún lado de la política y de esta forma se podrá mantener a pesar de los cambios políticos que se suceden en nuestro país y que de los que ninguna culpa tienen nuestros niños en la escuela.


Bibliografía


España. Ley Orgánica 2/2006, 3 de mayo. Ley orgánica de educación (LOE). Boletín Oficial del Estado, 4 de mayo de 2006, nº 106, pp. 17158-17207.

España. Ley Orgánica 8/2013, 9 de diciembre. Ley orgánica para la mejora de la calidad educativa (LOMCE). Boletín Oficial del Estado, 10 de diciembre de 2013, nº 295, pp. 97858-97921.

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